El Colegio de Aparejadores de Barcelona alerta acerca de mantener los edificios para afrontar episodios meteorológicos intensos
El Colegio de Aparejadores de Barcelona (CAATEEB) ha hecho un llamamiento a
hacer el mantenimiento de los edificios para garantizar la seguridad y puedan
hacer frente a los fenómenos meteorológicos intensos. La alerta se produce a
causa de las tormentas que tuvieron lugar el viernes pasado por la tarde, que
provocaron diferentes incidentes, como la caída de la cobertura metálica de un
edificio en Granollers. El CAATEEB recuerda que es necesario revisar las
fijaciones de fachadas y cubiertas, no acumular objetos ligeros en las terrazas
y balcones e inspeccionar periódicamente los desagües y las tuberías de las
viviendas.
Según el presidente del Colegio, Jordi Gosalves, “es indispensable hacer
una buena conservación de los edificios para evitar situaciones de riesgo que
pongan en peligro la vida de las personas y, que desgraciadamente, se dan con
excesiva frecuencia”. En este sentido el CAATEEB recuerda que cada seis horas
se recoge en los medios de toda España algún incidente relacionado con el
desprendimiento de una cornisa o de una fachada o el derribo de un edificio.
Gosalves cree “que ya existen instrumentos destinados a garantizar que las
edificaciones cumplan con unos mínimos por lo que hace a su rendimiento, ahora
lo que es necesario es aplicar-los con serosidad”. En este sentido, todas las
viviendas y edificios residenciales construidos en Catalunya después del año
1993 y los que tienen más de 45 años de antigüedad, tienen que disponer de un
Libro del Edificio, que establece y registra todas las operaciones de
mantenimiento que se deben realizar, además de obligar a los propietarios a
encargar a un técnico la gestión de las operaciones de mantenimiento y las
inspecciones reglamentarias.
El CAATEEB incide en que, según las previsiones de los expertos
medioambientales, fenómenos como tormentas de alta intensidad, pequeños
tornados, inundaciones o desprendimientos de taludes pueden ser cada vez más
frecuentes, como consecuencia del cambio climático.