Los Administradores de Fincas colegiados siguen trabajando con esfuerzo para garantizar un confinamiento en las mejores condiciones
Los Administradores de Fincas colegiados cuentan con la información y herramientas necesarias para poder seguir coordinando la resolución de cualquier incidencia.
La presidenta del CAFBL, Anabel Miró, recuerda que aún no conviene relajarse y que hay que continuar respetando las medidas de prevención en las comunidades de propietarios.
Corren tiempos difíciles para todos, la crisis no se ha dejado a nadie por el camino, pero cada uno desde su responsabilidad personal y solidaridad general está haciendo todo lo posible para acortar la distancia hasta superar esta situación que aún tiene un futuro incierto y consecuencias difíciles de calcular. De una cosa sí estamos seguros, que finalmente pasará.
Es precisamente en este momento en el que el apoyo de los Administradores de Fincas colegiados como profesionales de confianza de sus clientes, cobra un especial valor. Los Administradores de Fincas colegiados, más de 3.100 en Cataluña y más de 15.000 en toda España, trabajan con especial empeño para garantizar un confinamiento en tranquilidad, haciendo que la principal medida, quedarse en casa, sea posible en las mejores condiciones y potenciando así que la mayor parte de la población, que viven en edificios plurifamiliares, sientan la cercanía y seguridad suficiente, coordinando e implementando normas de convivencia y solidaridad vecinal.
Desde el Col·legi d’Administradors de Finques de Barcelona-Lleida se ha puesto a disposición de los profesionales una serie de guías, recomendaciones y canales para resolver todas las dudas y seguimos apoyando a nuestro colectivo para que puedan seguir trabajando con el mismo empeño y compromiso como han hecho desde el inicio. Cuentan con la información y herramientas necesarias para que, desde sus despachos profesionales y preferentemente mediante el teletrabajo, puedan seguir coordinando la resolución de cualquier incidencia y cumpliendo a su vez, con todas las distintas funciones que comportan su tarea multidisciplinar y, por lo tanto, muy compleja.
Ahora que parece que hemos pasado una primera fase, no conviene relajarse. Es lógico que, con el tiempo, se nos vayan olvidando estos nuevos hábitos, que entendemos suponen un mayor esfuerzo, pero hay que seguir respetando las normas como la de no usar los elementos comunes o la de utilizar el ascensor solo si es necesario y de uno en uno, priorizando el acceso por las escaleras. Asimismo, es indispensable extremar las medidas de limpieza y desinfección de los elementos comunes y no solo del interior de la vivienda. Además, es necesario gestionar correctamente los residuos domésticos, lavarse las manos con frecuencia, limpiar los filtros de los sistemas de climatización, ventilar la casa, limpiar los pomos (también de los puntos de acceso a contadores, si se necesita hacer cualquier comprobación), porque cuidar de ti es cuidar de todos.
Son momentos también para trabajar la empatía y la comprensión; los más pequeños necesitan juegos y distracciones que pueden suponer ruidos o molestias al resto de los vecinos; los mayores requieren más apoyo para superar la soledad. Es necesario permanecer atentos a las necesidades de los vecinos más vulnerables. La música nos acompaña, pero podemos modular su volumen; la televisión es una ventana al mundo, siempre que la usemos con moderación para evitar la sobreinformación y el estrés. Recordemos que no estamos solos y que vivir en comunidad es, a su vez, un valor y una oportunidad.
Cada día al salir al balcón o asomarnos a la ventana para compartir los aplausos, transmitimos alegría, cercanía y comunicamos esperanza. Sigamos allí, aportando mensajes positivos.
Gracias a todos por hacerlo posible: a los Administradores de Fincas por su excelente y constante labor de gestión, seguimiento y asesoramiento; a todas las empresas que dan servicio a los inmuebles, así coma a los conserjes y porteros que desarrollan con esfuerzo su tarea; a las Corporaciones profesionales por su aportación de representación y apoyo y, por último, un llamamiento a todas las Administraciones Públicas locales, autonómicas y estatales. Necesitamos medidas efectivas, claras y ágiles y seguimos a disposición de todos para conseguir que esta pandemia pase también a la historia como un ejemplo de superación y colaboración mutua.